DAGO GARCÍA: EN LOS OJOS DE LA MUJER AMADA

DAGO GARCÍA

«TE TENGO ENTRE OJOS»

El Vicepresidente del Canal Caracol, el director y guionista que batió su propio récord de taquilla en el cine nacional, el talentoso creativo que produce y produce de manera asombrosa, es un hombre absolutamente hermético con su vida privada. Él solo habla de su trabajo. Por eso quisimos que su esposa, María Mercedes Sánchez, la mujer que mejor lo conoce, lo abordara en esta entrevista. Aquí está el resultado. 

Por María Mercedes Sánchez A.

Fotos Camilo Sánchez y Archivo Particular.

Para hacer el cuestionario acudí incluso a Marcel Proust, porque lo que más nos critican a nosotros los periodistas de farándula es que siempre hacemos las mismas preguntas. Aquí hay interrogantes cuyas respuestas me interesan a mí y, otras tantas, a quienes las lean -entrevista hecha con mucho cariño para y por petición de María Cristina Guerrero- y ¡pensando también en darle gusto a los fanáticos de Dago  y  a sus  detractores! Mentiras, es un chiste.

Dago es calificado entre otros apelativos como El Rey de la Comedia, en mi caso, es conocido como El Rey de la Casa. Yo soy su Reina. Tiene dos hijas hermosas, una nieta que es toda una locura, unos papás maravillosos, una abuela de 97 años que todavía baila y toma whisky, y toda una familia de tíos y amigos que conserva y de quienes se nutre.

Al grano

A veces creo que Dago es un genio. Hace muchas cosas al mismo tiempo, todas bien, disfruta la vida y tiene tiempo para todo. Es verdad que al que madruga, Dios le ayuda. Si en su cronograma de trabajo se descuadra por trasnochar así sea hasta las 11 de la noche, por uno o dos días en la semana, se le viene una montaña de trabajo que sufre (mucho) de vez en cuando.

Lo veo dormir con su antifaz negro o azul rey a las 8 de la noche, y me despierto a las 5:30 a.m. para hacerle su desayuno. A esa hora, él ya ha rezado, escrito lo suyo y corregido lo de los demás. Ha cumplido también su ejercicio diario de 45 minutos, y yo apenas comienzo el día.  La lectura es lo suyo. El teatro es lo suyo. El fútbol es lo suyo. Shakespeare también. La salsa es lo suyo. Escribir es lo suyo. Producir, ejecutar, planear, liderar grupos de trabajo. Hace cine, teatro, televisión. Escribe argumentos, textos, obras, libretos, guiones, edita, revisa, entre muchas otras tareas. Le gusta estudiar. Y muchas veces, cuando está cayendo la noche, toca conga con su nieta Violeta Herrera, como también se llama la protagonista de REGUECHICKEN.

De lunes a viernes llega a la casa a las 4:30 de la tarde, lee, y ve muchas imágenes en varios dvds. También se sienta con Violeta a escuchar sus historias y conversar con ella.  Tiene tiempo para todo. Es organizado.

Por último, yo sé que le teme al «coco».

ESCLARECIMIENTO DE DUDAS

(Perdonen que lo tutee)

– En tu trabajo como escritor, ¿qué es lo más difícil para ti?

(Dago eleva los ojos, como si clamara paciencia, tal vez).

Pasar de las ideas abstractas a la realidad escrita. Ese siempre es un camino tortuoso, pues es transitar de la alegría del caos, a la densidad del orden.

– ¿Qué te motiva a levantarte a las 3 de la mañana?, ¿Lo hacías desde joven?

Me motiva el insomnio que sufro y que adquirí desde que tenía 7 años y vi la película Santo contra las momias de Guanajuato, en la que el personaje principal era enterrado vivo.

– ¿Por qué arriesgarte a hacer una película animada cuando ya tienes un mercado que manejas?

Primero que todo, no pienso que nadie maneje un mercado porque no hay quien pueda asegurar eso; y segundo, porque es un proyecto que desde hace un buen tiempo me viene dando vueltas en la cabeza y siento que llegó el momento de hacerlo realidad. Además, el que no arriesga un huevo no tiene un Reguechicken.

-Haces teatro, cine y televisión, ¿a dónde más quieres llegar?

Creo que inevitablemente, y tarde o temprano, hay que llegar a las redes sociales. Allí hay que encontrar la forma de expresarse y convertirlo también en una alternativa para nosotros como productores de contenido.

-Después de haber alcanzado el récord taquillero en el cine colombiano, ¿qué más quieres lograr?

Seguir estrenando dos o tres películas al año. Ojalá dentro de ellas, una animada. Estoy convencido de que solo la continuidad cualifica el oficio.

– ¿A cuántas películas has apoyado de otros directores de cine colombiano?

Colombianos, un acto de fe (Carlos Fernández de Soto); Bogotá 2015 (Verner Duarte); Kalibre 35 (Raúl García); Todos tus muertos (Carlos Moreno); Locos, De rolling por Colombia, y Pa (Harold Trompetero); Cazando Luciérnagas (Roberto Florez); El abrazo de la serpiente (Ciro Guerra).

– ¿Qué es lo que más te molesta?

Que me pregunten qué opino de la crítica. Generalmente se pretende crear una guerra entre la crítica y lo que hago, y realmente no estoy en guerra con nadie.

– En toda esta larga trayectoria profesional ¿en qué has cambiado?

Creo que poco a poco he ido descubriendo las virtudes y la efectividad de la sencillez narrativa. Ya no sufro de la ansiedad por contarlo todo en una sola película. Puedo decir que he aprendido a dosificar. Y siento que esa puede ser una señal de madurez profesional.

-¿Qué país del mundo te interesa conocer y por qué?

Japón, porque muy en el fondo siento que tengo algo de oriental. No solo los ojos rasgados.  (De joven le dedicaban la canción de Alfredo Gutiérrez “Tiene los ojos indios…”).

– ¿Qué programas de TV nacionales e internacionales te gusta ver?

Nacionales, me gusta ver Los informantes, Séptimo día (la mejor clase de dramaturgia que hay en la televisión colombiana), y las series y novelas del Canal Caracol. Me gustan las series norteamericanas, estilo House of Cards, Sixty Feet Under y, mi gran favorita, In Treatment.

– ¿Qué te gustaría que tus hijas y tu nieta asimilaran de ti?

Se rehusó a responder dos veces.

– ¿Cuándo aprendiste a desprenderte de la crítica positiva y negativa?

Desde el momento en que me di cuenta que ni por la una me podía autodestruir, ni por la otra comerme el cuento.

-Te he oído hablar de muchos equipos, al fin eres hincha ¿de qué equipos de fútbol?

Soy hincha de un solo equipo, América de Cali. Hay otros que me gustan como el Real Madrid y el Boca Juniors, pero hincha solo de la “Mechita”.

– ¿O de la Mechitas?

También.

– ¿Qué no debiste haber hecho nunca?

El baile de la vida.       

– En la vida tenemos que aceptar cosas o dejarlas pasar, ¿qué has tenido que pasar o aceptar en tu vida?

He tenido que aceptar que la gente no piensa igual a mí, ni tiene porqué vivir al ritmo que yo vivo.

– ¿Piensas escribir un libro?

Cuando tenga algo importante que decir, y eso le sale pero se le demora.

-¿Cuáles son las grandes pasiones de tu vida, aparte de escribir?

La música salsa, el fútbol, el teatro, y el cine de autor.

– ¿En qué personas de la vida real te inspiraste para hacer Reguechicken? Realmente en ninguna, aunque hay elementos de algunas. Por ejemplo, de mi nieta, y algunas cosas del Hamlet de Shakespeare, entre otros.

PREGUNTAS QUE NUNCA FALLAN

– ¿El principal rasgo de tu carácter?

La ansiedad.

– ¿Quiénes son tus autores favoritos?

Shakespeare, Brecht, Lorca, Molière, Stefan Zweig.

– Si te pusieran a escoger tres objetos para irte a una isla, ¿con cuáles te irías?

(Extrañaba la pregunta estúpida, musitó él).

Me llevaría mi iPod, las obras completas de Shakespeare, y un cortauñas.

– Los tres grupos o cantantes que más te gusten.

Héctor Lavoe, Eddie Palmieri, Tito Rodríguez y Benny Moré.

-Tu héroe de la vida real.

Cristiano Ronaldo.

– ¿Cuál es el cambio social que más admiras? (ahí sí lo dejé loco…)

Next.

-Tu lema:

“Al que madruga, Dios le ayuda”.

– Un consejo para quienes te siguen:

Que no escuchen consejos, y que escojan mejor a quien siguen.

– ¿Cómo es la televisión que quieres hacer?

La que estoy haciendo.

– ¿A quién frecuentemente le dices “fijo-fijo”?

A mis hijas y a mi nieta.

– ¿Estas preguntas ya te las habían hecho?

Sí.