OPINIÓN: TRÁMITES EQUIVOCADOS
El momento histórico que vive el país exige, más que nunca, la profunda convicción de dirigentes y ciudadanos -con mayor razón, de quienes desempeñamos la tarea educativa- en nuestros valores y principios democráticos, el respeto hacia las instituciones y la búsqueda de un porvenir mejor para las nuevas generaciones.
POR JOSÉ GREGORIO HERNÁNDEZ GALINDO (*)
Como todos lo hemos percibido, desde los días de las campañas a favor y en contra del plebiscito votado el 2 de octubre del año pasado, se ha generado en el país una gran polarización. Ella -que causa mucho daño y que genera rupturas, a veces muy grandes, en el interior de las comunidades y hasta en el seno de las familias- se ha venido extendiendo y las posiciones a favor y en contra del proceso de paz, de los acuerdos de La Habana, de las normas y medidas dictadas y de sus desarrollos e implementación, son cada vez más distantes.
Como es sabido, en mi caso, he sido partidario de la paz desde el comienzo, tal como resulta del entendimiento y práctica de ese derecho y de ese deber a los que alude el artículo 22 de la Constitución Política, no menos que de mi vocación personal por el Derecho y la vigencia de los fundamentos institucionales de la República y de mi animadversión hacia la violencia, la intolerancia y la vulneración de la libertad y los derechos de las personas.
No obstante, por razones jurídicas, he manifestado discrepancia respecto a algunos de los pasos posteriores a la firma del primer Acuerdo Final (Cartagena, 25 de septiembre de 2016), lo que no riñe con aquella inicial disposición favorable a la solución pacífica del largo conflicto armado que hemos padecido los colombianos por más de cincuenta años.
Pero debemos ser sinceros y coherentes con nuestros criterios sobre la prevalencia de la Constitución sobre cualquier otro acto o precepto. No era necesario vulnerar la Constitución de 1991, ni extender el alcance de los acuerdos más allá del ámbito propio de una negociación entre el Estado y un grupo subversivo que quiere entregar las armas, cesar en la actividad delictiva e incorporarse a la civilidad, a cambio de amnistía o indulto respecto a delitos políticos y los conexos con ellos.
No era indispensable, para lograr la paz, un acuerdo extenso e incomprensible para el ciudadano del común, relativo a asuntos que no guardaban relación con el conflicto, ni con su terminación. Pero se insistió en que ese documento era la paz; en que fuera de él no había salvación.
Se convocó a un plebiscito innecesario que versó sobre el Acuerdo, no sobre la paz; se polarizó el país; triunfó el NO, y el Gobierno desconoció los resultados de las urnas. El Acuerdo se volvió a firmar y, en vez de someterlo a la refrendación popular, como lo exigía el artículo 5 del Acto Legislativo 1 de 2016, el Gobierno lo llevó al Congreso, y a su acto de control político se le dio -abusivamente- el alcance de una refrendación popular. El Congreso, entonces, sustituyó al pueblo, cuando el artículo 3 de la Carta Política señala que sus representantes solamente pueden actuar en los términos que ella establece.
Se aprobó el Fast track, también inconstitucionalmente, y el Congreso renunció a sus facultades, lo que ha sido corregido en parte por el reciente fallo de la Corte Constitucional.
(*) Ex magistrado de la Corte Constitucional. Actual Rector de UNISINÚ Bogotá.
Autor
Puede Interesarte
Convocatoria para guionistas, productores y compañías de producción en Colombia
La unidad de desarrollo y producción de contenidos de Fox Networks Group (FNG) Latin America realizó el lanzamiento de su primera convocatoria, que tiene como objetivo fomentar el desarrollo de más y
DEL FREE PRESS A LAS RELACIONES PÚBLICAS
Muchas personas creen que hacer free press es igual que trabajar en relaciones públicas, y ahí comienza una cadena de errores en torno al mensaje, posicionamiento y fidelización, que se
El rol de los Publishers. El video será el medio más importante de los tiempos
No es una novedad que la forma de comunicarnos ha evolucionado con la era digital y ha permitido la llegada de nuevos medios con contenido editorial online, que permiten complementar
0 Comentario
¡Sin comentarios aún!
Puedes ser el primero ¡Comenta esta publicación!