HENRY LAGUADO GAMBOA: EL GENIO DEL FESTIVAL INTERNACIONAL DE CINE DE BOGOTÁ
Este certamen cumple 39 años levantando la bandera de Colombia en el panorama del séptimo arte mundial.
POR FERNANDO MOTTA
FOTOS ARCHIVO PARTICULAR
Henry Laguado Gamboa nació en Pamplona, Norte de Santander, y aunque su cédula es de Cúcuta dice sentir arraigo por los dos municipios. De esa tierra, donde se siente la bravura de sus llanuras y el ímpetu de sus escarpadas cumbres, él recuerda momentos agradables: “Paseaba por el Galán, la montaña de Pamplona, y oía el sonido de las canciones que salían de las cantinas, cuando me dirigía al Colegio Salesiano en Cúcuta”.
Nortesantandereano hasta la médula, estudió Ingeniería Industrial, y la mayor parte de su vida ha trascurrido en Bogotá. “Quiero esta ciudad. Trabajé muchos años en publicidad; entré al cine con cortometrajes y haciendo documentales de artistas sobre Grau, Obregón, Caballero, Barrera y Manzur”.
Su pasión por el cine empezó mirando películas en los matinales que presentaba el Teatro Jáuregui, en Pamplona. Años después cumplió un gran sueño: fundar el Festival de Cine de Bogotá. Desde entonces es el gestor cultural y el director de este importante evento que hace 39 años se realiza en la capital. “Cuando creé el Festival nadie quería que tuviera su apellido: Bogotá. No existía un certamen que impulsara, promocionara y premiara el cine colombiano, esa fue la principal razón que nos movió a institucionalizarlo. Con el tiempo nos constituimos como el evento internacional que lleva su nombre desde 1984.
¿Cómo ha sido la experiencia dirigiendo el Festival de Cine de Bogotá?
Maravillosa por la respuesta mundial, aunque extenuante para elegir 100 películas que son las que constituyen la programación del Festival.
El certamen cumple 39 años, ¿a qué se debe su éxito?
Siempre estamos reinventándonos. Y la pandemia, por ejemplo, nos llevó a realizar el Festival de manera virtual.
¿Qué película abrirá esta versión?
Será una sorpresa que debe llegarle a cada uno de los colombianos, ellos recordarán las películas que han visto y el poder de nuestro cine.
¿Qué cintas verán?
Con base en su calidad podrán ver películas de distintos géneros. Los temas los ponen los buenos directores y estos cambian. Por ejemplo, en lo que hemos visto hasta ahora, hay una gran preocupación por lo político, lo indígena y lo relacionado con el LGBTQ+.
¿Cuántos países están invitados este año?
Estamos iniciando la selección oficial. Hemos recibido más de 1800 películas de 68 países. Elegiremos las mejores producciones y tendremos espacios especiales donde presentaremos películas de países casi desconocidos en Colombia.
¿Cuál es el género cinematográfico por el que se inclinan los colombianos?
Las películas comerciales a nivel mundial y las que produce Dago García.
El Festival inició en 1984, ¿cómo ha logrado estar vigente durante casi cuatro décadas?
Hemos podido renovarnos y ser una plataforma para los nuevos directores, les sirve a ellos y le da al público los indicios de hacia dónde va el buen cine en el mundo.
¿Ha tenido algún momento difícil con el evento?
Muchas veces se ha querido tirar la toalla. En Colombia uno de los deportes es buscarle el pierde a algo exitoso. El contra: seguir andando.
De las películas que ha visto, ¿cuáles son las más inspiradoras e influyentes?
La primera que vi sobre la Virgen de Fátima, cuando cursaba kínder, y Cinema Paradiso, siempre lloro al verla, es la única que me produce ese sentimiento, quizá porque refleja la pasión que me mueve por el cine.
¿Cómo ve el cine colombiano?
Va en dos ramas paralelas que deben unirse: la que se detiene a registrar todos nuestros problemas y la que se dedica a divertir a los colombianos, a retratarlos en sus comportamientos. La primera gana los premios internacionales; la segunda acapara gran número de espectadores nacionales.
¿Qué novedades trae la versión 2022?
Solo hasta el primero de septiembre tendremos confirmado el programa.
POR DENTRO Y POR FUERA
Un defecto:
La responsabilidad.
¿Qué lo ruboriza?
Quedar mal.
¿Cuál es su frase más frecuente?
“Sigamos adelante”.
¿Qué no puede faltar en su mesa de noche?
Un vaso de agua y un radio.
¿La mejor película?
Muchas. La estrategia del caracol, El ciudadano Kane, El acorazado Potemkin, Un perro andaluz, y siguen más…
¿Y la peor?
Demasiadas para nombrar.
Una pasión:
El cine.
Su música favorita:
Clásica, ópera y vallenato.
Un domingo perfecto:
Hoy en día, ver las películas del Festival y, a veces, ir al campo.
¿De quién es fan?
De Bogotá.
¿Cada cuánto reza? Sólo a nivel mental.
Su comida preferida:
Las pastas.
¿La pintura o la escultura?
La pintura.
¿Qué lo frustra?
Los palos en la rueda. No ver las caras de los enemigos ocultos y no saber sus motivaciones.
¿A quién lee?
Marcel Proust, el mejor.
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