Día de la Gastronomía Sostenible: menos desperdicio, más conciencia en la cocina

La gastronomía sostenible es una forma de cocina que considera el origen de los ingredientes, sus métodos de cultivo y su conservación, promoviendo prácticas que cuiden los recursos y la salud de quienes los consumen.

Según el Departamento Nacional de Planeación – DNP -, en Colombia se desperdician 6,1 millones de toneladas de frutas y verduras al año, principalmente en los hogares.

Colombia, junio de 2025. Cada 18 de junio se conmemora el Día de la Gastronomía Sostenible, una fecha establecida por la Organización de las Naciones Unidas – ONU- para promover prácticas alimentarias que reduzcan el impacto ambiental, fortalezcan los sistemas de producción local y fomenten el consumo responsable y consciente.

Colombia cuenta con una de las ofertas alimentarias más diversas del mundo, gracias a su variedad de frutas, verduras, cereales, raíces y proteínas, propias de sus regiones tropicales, andinas y costeras. Esta riqueza permite múltiples formas de combinar, conservar y preparar los alimentos, lo que representa tanto una oportunidad culinaria, así como un desafío a la hora de reducir el desperdicio. Compañías como Haceb han asumido el reto de desarrollar soluciones que se adapten a las necesidades y hábitos del consumidor colombiano, promoviendo el uso eficiente de electrodomésticos en el hogar.

El desperdicio de alimentos sigue siendo uno de los principales desafíos en el mundo. De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura – FAO -, un tercio de los alimentos producidos en el mundo (cerca 1.300 millones de toneladas al año) se pierde o se desperdicia. En Colombia, esa cifra, según el DNP, alcanza los 6,1 millones de toneladas de frutas y verduras cada año, una proporción significativa que ocurre dentro de los hogares.

Ante este panorama, la FAO destaca que una de las formas más efectivas de aplicar la gastronomía sostenible es evitar el desperdicio de alimentos, desde la compra y el almacenamiento, hasta la preparación y el consumo final. Reducir las pérdidas no solo contribuye a la seguridad alimentaria, sino que también disminuye el impacto ambiental y el uso innecesario de recursos. En ese contexto, Haceb innova en sus productos con tecnologías enfocadas en la conservación de alimentos, así como en la gastronomía sostenible con eficiencia energética.

“En Haceb tenemos como propósito el bienestar y progreso de los hogares, y para lograrlo la conservación de los alimentos juega un factor esencial, pues determina la forma en la que nos alimentamos y también el impacto que generamos en el planeta.  Desde la industria, tenemos la responsabilidad de desarrollar soluciones que ayuden a las personas a reducir el desperdicio y adoptar hábitos de consumo más responsables, tanto en términos de sostenibilidad como de bienestar en el hogar”, Claudia Elena Penagos, jefe de gestión de portafolio en Haceb.

La Encuesta Nacional de Biodiversidad y Cambio Climático de WWF muestra que los colombianos ya realizan parte de las acciones necesarias para reducir el desperdicio; el 61% afirma cocinar solo lo que va a consumir y el 51% dice comprar solo lo que necesita y en cantidades adecuadas. Sin embargo, guardar lo que sobra o almacenar los alimentos de la forma adecuada para prolongar su vida útil son medidas que solo realiza el 30% de los colombianos.

La nevera es uno de los electrodomésticos esenciales para el hogar. Conscientes de su importancia, Haceb presenta algunos consejos útiles a la hora de almacenar alimentos para su conservación, frescura y uso sostenible:

• En el congelador: todo tipo de carnes rojas y blancas.
• En la parte media: Lácteos, madurados y alimentos en proceso de descongelación.
• En la parte baja: alimentos próximos a consumirse.
• En los cajones inferiores: frutas y verduras.
• En la puerta del refrigerador: salsas, encurtidos y productos que requieren menos refrigeración.

También se recomienda contar con una cantidad óptima de alimentos para que los flujos de aire puedan circular y utilizar recipientes herméticos para evitar la contaminación cruzada. Algunos alimentos como banano, aguacate, papaya, cebolla, ajo, tomate, papa y quesos secos no deberían refrigerarse, ya que sus propiedades pueden alterarse al estar expuestos a bajas temperaturas.

La cocción también juega un papel determinante en la gastronomía sostenible. Utilizar eficientemente las cubiertas, permite aprovechar mejor los recursos del hogar y reducir el desperdicio. Así mismo, tapar las ollas mientras se cocina, apagar el fuego unos minutos antes de terminar, reutilizar ingredientes y preparar varias recetas al tiempo son prácticas eficientes a la hora de cocinar.

Este 18 de junio, el Día de la Gastronomía Sostenible invita a reflexionar sobre los hábitos en la cocina y el papel que cada persona, empresa y sector puede desempeñar en el cuidado de los alimentos. En un país como Colombia, con una biodiversidad alimentaria tan amplia, pequeñas acciones pueden generar un impacto relevante en el medioambiente, el bolsillo y el sabor en el hogar.