Beatriz Helena Álvarez: EN SU MEJOR MOMENTO
La presentadora de La Revista CM& siente que su vida es una ventana abierta a la felicidad en todas sus expresiones. Tiene una excelente relación con su hijo de 21 años, y se casó recientemente con el empresario Alejandro Kramarski.
Por Ketty Lora Benedetti
Fotos Archivo Particular
Todo comenzó hace un año, cuando regresó de México, país en el que planeaba radicarse para trabajar en el Canal TV Azteca, porque sería una gran oportunidad para refrescar un poco su vida. Estando en el gimnasio, se le acercó una amiga y le propuso presentarle telefónicamente al que consideraba podría ser la pareja ideal para Beatriz. Escéptica a este tipo de encuentros programados, aceptó la invitación a almorzar. A la tercera salida se confirmó que sí era el momento y sí era la persona, porque empezó a sentir mariposas en el estómago que vaticinaban algo muy importante entre los dos.
¿Cómo se dió cuenta de que Alejandro sería el hombre de su vida?
Transcurrieron un par de semanas compartiendo muchos espacios, nuestra relación iba muy rápido y yo sentía que me generaba mucha confianza, ese era el principal motivo que me impulsaba a seguir. Poco a poco fui descubriendo a un hombre maravilloso, con mucho qué ofrecer y cuando me habló de matrimonio, no tuve que pensarlo mucho, le aposté a mi intuición y a mi piel.
¿Qué les gusta hacer juntos?
Compartimos la pasión por el gimnasio y los viajes, dos de nuestras actividades favoritas.
¿Qué la conquistó de Alejandro?
La principal cualidad que yo buscaba en una pareja en este momento de mi vida era la confianza, la seguridad de creer en su palabra y en sus actos, y fue lo primero que me conquistó de Alejandro, también su inteligencia e independencia.
¿Cuál es el punto de equilibrio entre un judío y una católica?
Nuestro punto de equilibrio es Dios. Allí es donde termina la religión y la diferencia de credos, aunque ninguno de los dos es practicante del catolicismo o el judaísmo, somos personas muy creyentes y de fe.
¿Cómo es la relación de él con su hijo?
Mi hijo vive actualmente en Chile por eso solo habían tenido la oportunidad de verse a través de Internet, pero cuando lo hicieron personalmente, la relación fluyó de forma cordial y respetuosa.
¿Podría decir que está pasando por uno de sus mejores momentos?
Todas las etapas de mi vida han sido bellas e interesantes, pero en esta me siento realmente fuerte y decidida a encontrar lo que quiero, ¡a ser feliz!
¿Cómo escogieron el lugar para su luna de miel?
Estuvimos de luna de miel en Shanghai, Thailandia, y un día en Nueva York. En realidad aprovechamos un viaje de trabajo de Alejandro a China y ambos coincidimos en querer conocer Thailandia y sus islas, además, porque es uno de los destinos más encantadores y buscados en el mundo para disfrutar la luna de miel.
¿Por qué decidieron casarse en La Guajira, después de la ceremonia civil en Bogotá?
Nuestra ceremonia simbólica fue en Palomino, porque Alejandro me concedió el sueño de hacerlo frente al mar y creímos que las playas entre La Guajira y Santa Marta, aunque poco promocionadas turísticamente, tienen la magia única del Tayrona.
¿Qué cambios ha traído esta unión a su vida?
Los cambios son grandes en cuanto a dinámica de vida, pues llevaba muchos años viviendo sola y ahora me enfrento al gran reto de ser cada día mejor esposa, mejor compañera, mejor amiga, mejor amante… Es un trabajo adicional que requiere de mucha energía y sobre todo de aprendizaje constante.
Después de alcanzar reconocimiento, éxito profesional, ser madre y ahora una mujer nuevamente enamorada, ¿qué sigue?
La vida y Dios me sorprenden todo el tiempo y tengo fe en que esto no dejará de suceder. Siento que Dios me ha puesto en el camino lo que necesito, sin necesidad de buscarlo tanto. Mi propósito es seguir creciendo como ser humano, trabajar mucho más mi lado espiritual, para así mismo ayudar a otros y retribuir tantas cosas buenas que me llegan.
Cree en el destino, o en que cada uno se hace el camino al andar.
Creo en los dos. Dios es quien tiene para nosotros un camino y una serie de acontecimientos y personas que trazan ese destino, pero somos nosotros quienes nos encargamos de marcar la ruta y la llegada. Así que, en últimas, creo que nos dan las herramientas y es nuestra responsabilidad aprovecharlas o no.
Su mayor felicidad…
Mi mayor felicidad ha sido ¡VIVIR!
No me arrepiento de absolutamente nada de lo que he vivido, porque me ha formado en la persona que soy y con la cual estoy muy complacida, aunque sepa que me falta mucho camino por recorrer, si Dios me lo permite.
Autor
Puede Interesarte
LAURA GONZÁLEZ: LIDERAZGO, DISCIPLINA Y PASIÓN
La bella Señorita Colombia no obtuvo la ambicionada corona de Miss Universo, pero se trajo el sexto título de Virreina Universal de la Belleza para nuestro país. POR FERNANDO MOTTA
Fundación Avon Para la Mujer: concientización y servicio social
Quien está al frente de la campaña de concientización en la lucha contra el cáncer de mama es una mujer apasionada, sensible y muy comprometida con cada programa, con cada
CLARA WEBB: SU EXITOSO TRANSITAR POR EL SUEÑO AMERICANO
Esta gestora cultural internacional es la delegada por la Honorable Juez de la Corte Suprema de Justicia del estado de Nueva York, Carmen Velásquez, en el G-100 para la Cultura
0 Comentario
¡Sin comentarios aún!
Puedes ser el primero ¡Comenta esta publicación!